Ansiedad. Estrés. Noches inquietas. Sentir frio. ¿Es posible que haya una cosa que pueda ayudar con todos estos problemas? Una manta pesada podría ser su nuevo mejor amigo.
Los terapeutas y los psiquiatras han usado mantas pesadas durante mucho tiempo para sus pacientes, pero en los últimos años se han generalizado. Las mantas pesadas, o mantas de gravedad, son mantas con un peso adicional, como su nombre indica. El peso se agrega típicamente a la manta con bolitas de plástico, cuentas de vidrio o arroz. El peso ideal es aproximadamente el 10% de su peso corporal.
¿Cómo trabajan? Se ha demostrado que las mantas pesadas aumentan la producción de melatonina, una hormona que regula el ciclo del sueño, a través de la estimulación sensorial. El aumento de melatonina conduce a un aumento de la serotonina, un neurotransmisor que contribuye a los sentimientos de bienestar y felicidad, lo que puede ayudarlo a quedarse dormido más rápido y más fácilmente. Las mantas pesadas recrean el peso de alguien que lo sostiene mientras duerme, y las investigaciones demuestran que ayudan a aliviar la ansiedad. También pueden ayudarlo a permanecer dormido durante toda la noche.
Según se informa, las mantas pesadas ayudan a crear un enfoque para adultos o niños con TDAH, así como a aliviar el síndrome de piernas inquietas y los síntomas del trastorno de estrés postraumático y mejorar su estado de ánimo. También debe buscar mantas que pesen entre 10 y 25 libras, según el peso de su cuerpo. Los bebés y niños pequeños no deben usar mantas pesadas debido a preocupaciones de seguridad. Si tiene problemas para quedarse dormido o dormir, una manta con peso podría ser una solución cómoda para usted.
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